El cerebro se cree todo lo que le decimos, cada una de las cosas que pensamos, las historias y los escenarios que creamos y hasta las conversaciones que inventamos.. Y no lo digo yo, ni la biblia😊, en este caso el psicólogo mexicano Juan Lucas Martin le contó en esta entrevista a Aislinn Derbez, como superó una enfermedad muy fuerte a los 21 años enfocándose solo en sus pensamientos y emociones.
Entonces si partimos de esta idea, si yo creo, ¿Yo soy?
Estaríamos hablando de una realidad donde la fórmula funcionaría mas o menos así: Lo pienso, lo siento, lo expreso* y lo atraigo.
(*... de cualquier forma: hablando, escribiendo, dibujando, etc..)
¿Qué sucedería si elegimos levantarnos de la cama todos los días pensando que hoy será un gran día?
¿Cómo me sentiría si cada vez que me veo en un espejo me digo que soy hermose?
¿Qué pasa cuando no sale de nuestra cabeza un comentario negativo que alguien hizo respecto a nosotros personalmente?
Si es verdad que no podemos tener control sobre todo lo que pensamos, pero podemos elegir como sentirnos respecto a todos esos pensamientos que tenemos todo el día, durante todos los días y que por lo general, no paran, podemos elegir a que le damos atención y hasta cuando, que alimentamos en nuestra propia mente y a que le damos fuerza.
¿Y si comenzamos por aquí? Estudiemos que es lo que esta sucediendo en nuestra mente y cual es la historia que nos estamos contando a nosotros mismos una y otra vez.